Esta entrada es bilingüe.
Tenemos dos nuevas especies de ballena. La primera, Balaenoptera omurai, es de reciente descubrimiento. La otra, Balaenoptera brydei, se ha desgajado de una especie bien conocida, Balaenoptera edeni.
The number of rorqual whale species swimming in the world’s oceans has jumped to eight from six, according to new research by a team of Japanese scientists published in tomorrow’s issue of the science journal Nature. The research shows that rorquals commonly referred to as Bryde’s whales actually represent three distinct species.
Y te preguntarás varias cosas. Probablemente la primera sea algo así: ¿y cómo es que no las han descubierto antes? Una ballena no es algo que pasa desapercibido, ¿no?
No, verás, el que hayan descubierto la nueva especie no significa que no conocieran los animales, sino que estaban mal clasificados. La primera cuenta con muy pocos invidividuos y los pescadores no le habían prestado gran atención, confundiéndola con individuos raros de otra especie. La segunda es bien conocida, sólo que ahora se admite que lo que antes se creía que era una sola especie son, realmente, dos. Se ha llegado a esa conclusión examinando rasgos morfológicos (cráneo más aplanado y otros) y el ADN mitocondrial.
Yamada and colleagues Shiro Wada of the National Research Institute of Fisheries Science in Yokohama and Masayuki Oishi of the Iwate Prefectural Museum in Morioka, gained access to the specimens and based their conclusions on a comparison of the species’ morphology (body form), bone structure, and DNA.
También te puedes preguntar qué qué importancia tiene eso. Un animal es un animal, y existe le llamemos como le llamemos. Pero desgraciadamente sí tiene consecuencias. Porque nosotros tomamos decisiones en función de lo que sabemos de la naturaleza. Y aquí hay consecuencias para la conservación de las ballenas.
Verás, el concepto de especie está relacionado con el de comunidad reproductiva. Todos los seres vivos capaces de reproducirse entre sí forman una misma especie. Y los que no se pueden reproducir con ellos son de otras especies. Si hay muchos individuos agrupados en la misma especie, tienen oportunidades de aparearse con facilidad. Pero si esos mismos individuos, realmente son varias especies, no todos se aparearán con todos. Más especies significa menos probabilidad de encontrar alguien con quien reproducirse. Que haya división reproductiva real entre grupos que antes se juzgaban homogéneos es una mala noticia para su conservación, dado que actuábamos como si hubiera una, no varias.
Hemos estado cazando en exceso. Por no haber comprendido qué especies hay.
Vamos que… recien «descubiertas o redescubiertas» y ya van de cabeza a la Lista Roja de especies en preligro de extinción…
Gran Post como de costumbre 🙂
Un saludo