Algo sobre propiedades emergentes

La emergencia es una propiedad de todos los sistemas complejos. Proviene de las interacciones. Normalmente nos ocupamos de los elementos que forman los conjuntos porque son cosas materiales. Se pueden tocar, patear, tomar en la mano, etc. Las interacciones no son materiales. Son influencias que ejercen entre sí los elementos. Por eso las hemos despreciado durante mucho tiempo. No se ven.

¿Pero qué pasa cuando las interacciones se tienen en cuenta? ¿Qué pasa cuando las interacciones se consideran nuevos elementos? ¿Qué pasa cuando las interacciones modifican a los elementos? ¿O cuando modifican a otras interacciones?

Ahí es donde aparecen las propiedades emergentes. No las tienen las partes aisladas porque, aisladas, no existen interacciones. Sólo existen cuando las partes están juntas, en el sitio correcto en el momento adecuado. Y las propiedades que aparecen no siempre son predecibles porque surgen de la complejidad. Suele ser más rápido poner juntos los elementos y a ver qué pasa (comprobación empírica) que intentar predecir qué pasará (comprobación a priori).

La comprobación empírica (el «a ver qué pasa»), según de los elementos de los que se trate, puede ser muy peligroso. Imagínate producir una sustancia química nueva, y muy útil para una función. Y luego tirarla porque crees que no va a ocurrir nada. Pero, ¿y si al final pasa? Eso ha sucedió con los CFCs y el agujero de ozono. Ha sido una sorpresa. No nos lo esperábamos. Ha sido un experimento sin querer. Los seres humanos hemos introducido en el sistema atmosférico un elemento nuevo. Y con él, nuevas interacciones. Si hubiéramos tenido un ordenador suficientemente potente para calcularlas antes de probarlas y a ver qué pasa (que se llama método empírico, te recuerdo)…

La emergencia forma parte de cualquier campo. En la biología está por todos lados. ¿Protege una célula de la piel? Una no. ¿Protege la piel completa con todas sus células? Toda sí. Si voy quitando células, ¿cuándo dejará de proteger? ¡Ah……! Ahí está la gracia, en reducir un sistema a lo mínimo (a lo más barato) y que siga funcionando. Esa es la clave en biología. Lograr emergencia con lo mínimo. Con lo más barato.

Por cierto, que la vida misma es una propiedad emergente. Está hecha de elementos (biomoléculas) que interaccionan. Y en esas interacciones, en algún momento (célula), aparece algo que llamamos vida. ¿Cuál es la vida mínima? Se está investigando. Por ahora es Mycoplasma genitalium. Hasta ahora no hay ser vivo menor. Menos, y sería un virus.

Cuando sepamos calcular bien la emergencia, salvaremos la humanidad. Porque así evitaremos la comprobación empírica de las propiedades emergentes. Ya te dije que puede ser muy peligrosa en según qué campo.

¡En vuestras manos está nuestro destino, informáticos!

Y, de paso, podremos saber lo que es la vida.

12 respuestas a «Algo sobre propiedades emergentes»

  1. Keko

    Hola José Luis. Estoy dándome una vuelta por tu más que interesante blog. Mucho, mucho que leer.
    ¡ Un saludo !
    Keko (de ‘Público’)

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  2. Pingback: Blog de José Luis Castillo » Resiliencia y resistencia

  3. martin

    hola jose luis te queria comentar que tu blog es muy interesante y aparte me ayudo a hacer unos deberes de biologia desde ya muchas gracias!!!!!

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  4. maRtha!!

    gracias por la informacion, esta genial, me sirvio mucho para la maestra que no deja mas que tareas, muchas tareas me sirvio mucho para podr hacer un buen ensayo

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  5. sarai

    es muy buena la informacion que se da es la primera vez que entro al blog y la informacion que se proporciona es adecuada solo quisiera pedirte un favor si podrias mencionar algunos ejemplos de propiedades emergentes en los sistemas ……

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  6. José Luis Castillo

    ¡Hola Sarai!

    Pues el propio pensamiento. Esa propiedad la tiene el conjunto de neuronas, pero ninguna de ellas. O la capacidad de nutrirse, que se basa en la coordinación de locomotor y nervioso (para lograr alimento), digestivo y respiratorio (para procesarlo y pasarlo a la sangre), circulatorio para repartirlo… Nadie tiene la función de nutrición, sino que surge de todos ellos juntos, acompasados.

    Si te fijas, casi todo son propiedades emergentes. Cosas que podemos hacer nosotros, con nuestras células. Pero nuestras células sueltas, aisladas, no.

    ¡Un saludo!

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    • José Luis Castillo

      ¡Hola Gaston!

      Imagina unos bloques que tienen unas rayas. Esa es su propiedad, tener rayas. Ahora ponlos juntos. Puede aparecer un dibujo. De una cara, por ejemplo. La cara es una propiedad que tengan los bloques, sino el conjunto. Los bloques sólo aportan rayas. Y la cara sólo aparece si están juntos, agrupados de una determinada manera.

      Eso serían las propiedades emergentes.

      Algo que poseen los conjuntos, pero no sus partes. Ÿ no cualquier conjunto, sino uno que cumpla unas especificaciones. En este caso, situarse los bloques de un modo concreto. Las propiedades emergentes, por tanto, derivan de las partes, pero también de cómo se organizan cuando se unen.

      ¡Espero haber ayudado! 🙂

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